La violencia en el noviazgo

Itzuri Peña

Te quiero más que ayer, pero menos que mañana. La violencia en el noviazgo

En esta época del año me gusta ver la saga de Crepúsculo, es como una tradición para mí. No sé qué tiene el otoño, pero se disfruta más, ya sabes, un buen un libro y un café…. Cada año la miro desde una perspectiva diferente; por ejemplo, desde que soy feminista le encuentro más y más detalles, algunos más risibles que otros, aunque este año en particular no puedo evitar pensar que Charlie era el único personaje green flag de la trama.

Cuando era adolescente romantizaba el tipo de relación que tenía Bella con Edward, la de Gabriela y Troy, la de Blair y Chuck, la de Charly y Nico, o la de Selena con Justin; claramente ninguna de las anteriores son ejemplos de relaciones sanas y no violentas. Cada una de ellas se caracteriza por estar permeadas de violencia en menor o mayor medida, aunque esto no lo supe sino hasta que experimenté violencia en mi primera relación de pareja, e incluso durante la relación no sabía que la estaba viviendo.

Conocer qué es la violencia en el noviazgo nos puede ayudar a detectarla, denunciarla, prevenirla o erradicarla, asimismo conocer nuestros Derechos Sexuales y Reproductivos como el derecho a decidir libremente con quién o quiénes relacionarnos de forma afectiva, erótica y social, contribuye a tener relaciones libres de violencia.

Mi violencia con todo, por favor

Me hubiese gustado que alguien me explicara que la violencia no sólo se expresa de manera física o directa y que, de hecho, hay tres tipos de violencia según el sociólogo noruego Johan Galtung. La primera de ellas es la más conocida, es decir, la directa. La violencia directa es literalmente la acción de una persona que causa daño directo sobre otra; esta es la más “visible” de todas, pues con base en el violentómetro del INMUJERES, se trata de manoseos, golpes, pellizcos, empujones, cachetadas, etc.

En cambio, los otros dos tipos de violencia son “invisibles”, pues la violencia estructural se representa mediante acciones indirectas ejercidas por las instituciones, y la violencia cultural justifica normas, ideologías, valores y tradiciones violentas. Este último tipo lo podemos reconocer cuando se justifican los celos como una demostración de afecto, o cuando un niño te molestaba en el kínder porque “le gustabas” y en lugar de ponerle límites tenías que aceptar sus acciones como un halago, o cuando escuchamos las siguientes frases: “si me cela es porque me quiere”, “a mí me gustan tóxicas, que me controlen…”, “tengo que pedirle permiso para salir con mis amigxs”, etc. ¿Te suena?

Entre broma y broma, la violencia se asoma… Entonces, las bromas, el chantaje, las mentiras, el ignorarte, ofenderte o humillarte también forman parte de actitudes violentas que tal vez no se vean en tu piel, pero crean marcas emocionales. Algo que debemos tener claro es que la violencia en las relaciones sexo afectivas no es algo que se note desde el inicio o que incluso la reconozca las partes involucradas. A veces las acciones violentas son invisibilizadas debido a la idealización de las primeras facetas del enamoramiento, y estas incrementan a medida que se normaliza o justifican dichas acciones.

Violencia en el noviazgo

Antes de seguir avanzando en esta amigable reflexión, me gustaría hacer una breve aclaración. La violencia de género y la violencia hacia las niñas y mujeres no es lo mismo. Pues, en la primera son aquellos actos que dañan a una persona o personas por razones de género, ya sea, femenino, masculino o no binario; esta violencia está basada en la perpetuación de roles y estereotipos de género. En cambio, la violencia contra las niñas y mujeres si son acciones basadas en generar un daño a este grupo.

Con lo anterior despejado podemos hacer la precisión sobre qué es la violencia en el noviazgo o de pareja. Esta es toda aquella “agresión física, psicológica, mental y sexual con el fin de dominar y mantener el control sobre la otra persona.”[1] Por lo tanto, las acciones violentas pueden provenir de ambos géneros, o sea de él, ella o elle; pues la violencia pueden tomar lugar en cualquier tipo de relación.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) de 2021, más del 80% de las mujeres jóvenes (15-24 años) en México tuvieron una relación de pareja[2]. La ENDIREH señala que el 16.8%[3] de las mujeres de 15 años y más experimentó violencia física durante la relación, y el 6.9% de ellas sufrió violencia sexual. Sin embargo, solo el 4.8% de todas las mujeres encuestadas denunció la agresión, y el 78.3% no solicitó apoyo o denunció debido diversos factores, pero entre ellos destacan el miedo, la vergüenza y el desconocimiento.

Además, en dicha encuesta se arrojaron datos alarmantes cuando se trató de describir cómo eran las relaciones de las mujeres jóvenes de 15 años y más, pues a lo largo de su relación actual o última casi la mitad (40%) de las encuestadas respondieron que tienen o tuvieron un noviazgo violento[4].

En todos los grupos etarios el tipo de violencia que prevalece en las relaciones de pareja es la violencia emocional, física, y sexual. No obstante, la violencia emocional o psicológica es la que protagoniza en las relaciones de las adolescentes y mujeres jóvenes de entre 15 a 24 años.

¡Ahora todo es violencia! Spoiler: siempre lo fue. Modalidades y tipos de violencia.

¿Sabías que en México existe la Ley General de Acceso de Las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV)?, existe desde 2007 y, como su nombre lo sugiere, su propósito es prevenir, erradicar y/o sancionar la violencia contra las mujeres para el goce de nuestros Derechos Humanos. En la LGAMVLV, se establecen las modalidades y tipos de violencia. La modalidad es la forma, manifestación o ámbitos (espacios) donde ocurre la violencia contra las mujeres, en otras palabras, es el dónde, este puede ser en el ámbito familiar, laboral y docente, en la comunidad, político, o incluso en lo digital y mediático.

Por otra parte, en el poderosísimo artículo 6 de la LGAMVLV se clasifican los tipos las violencias:

  1. Psicológica
  2. Física
  3. Patrimonial
  4. Económica
  5. Sexual
  6. Cualesquiera otras formas análogas que lesionen o sean susceptibles de dañar la dignidad, integridad o libertad de las mujeres

Entonces las modalidades son el dónde y los tipos son el cómo, o sea que puede ocurrir un acto de violencia psicológica en el ámbito familiar, o un acto de violencia sexual en el ámbito laboral. Ahora bien, dentro del ámbito de las relaciones sexo afectivas o de noviazgo, la violencia puede manifestarse como un ciclo:

  1. Fase de tensión: cuando alguna de las partes o ambas comienzan a tener comportamientos hostiles hacia la otra persona, dando lugar a una acumulación de molestias o inconformidades.
  2. Fase de agresión: es cuando la violencia se hace visible, ya no solo es psicológica sino también física y sexual.
  3. Fase de luna de miel: la parte agresora muestra arrepentimiento y busca el perdón de su pareja intentando justificar su actitud violenta.
  4. Se repite el ciclo.

Muchas veces los tipos pueden ser tan sutiles -como lo es la violencia psicológica- que cuando estamos dentro de una relación violenta no podemos identificarla como tal, y asumimos que no existe violencia porque no es visible o directa. Incluso puede que por mucho tiempo la violencia sea discreta pero sostenida hasta un momento de estallido. Es por eso que es un ciclo, pues no tiene un inicio reconocible.

¿Cómo sé que mi relación es violenta?

Antes de describir una relación violenta como una lista del super, quiero decirte que no estás solx y que tienes derecho a decidir terminar o continuar con tu relación. Sólo tú tienes la capacidad de escoger con quien relacionarte, elegir cuándo y cómo salir de cualquier relación, así como decidir sobre tu cuerpo y planes de vida.

  • ¿Te chantajea con terminar?
  • ¿Se burla de tu aspecto, situación, identidad, capacidades?
  • ¿Te miente o engaña?
  • ¿Cuándo se molesta contigo te ignora sin dar explicaciones?
  • ¿Te culpa porque la relación no va bien?
  • ¿Te insulta o hace comentarios hirientes?
  • ¿Te humilla en público o en privado?
  • ¿Amenaza con quitarse o quitarte la vida?
  • ¿Controla o prohíbe tu forma de vestir, amistades, acciones sobre tu cuerpo?
  • ¿Rompe tus objetos? Como maquillaje, destruye tu comida para que no le tomes fotos, consolas de videojuegos, etc.
  • ¿Te toca sin tu permiso?
  • ¿Te ha golpeado ‘jugando’?
  • ¿Suele pellizcarte o arañarte de ‘broma’ o cuando está molestx?
  • ¿Te ha empujado, jaloneado, cacheteado, o pateado?
  • ¿Te ha aislado o alejado de amigxs o familiares?
  • ¿Te ha amenazado con objetos punzocortantes o armas?
  • ¿Te ha forzado o manipulado para tener relaciones sexuales?

Sí has respondido que sí a alguna de estas preguntas o conoces a alguien que tiene ese tipo de relación, primero déjame darte un abrazo y/u ofrecer acompañarle a esa persona si es que así lo que desea. Cual sea el caso, se recomienda hablar con alguien de confianza para recibir apoyo ante cualquier situación de violencia.

Las LUNAS de la Secretaría de las Mujeres son centros de atención y prevención de violencia; en estos lugares ofrecen asesoría legal pero también acompañamiento psicológico. Además, si es pertinente, canalizan a mujeres y a las personas con capacidad de gestar a los servicios de Interrupción Legal del Embarazo. Conoce más de estas unidades aquí: https://www.semujeres.cdmx.gob.mx/lunas

Por otra parte, existen centros de apoyo y acompañamiento psicológico que pueden ser herramientas útiles como:

¿Y esto qué tiene que ver con mis derechos sexuales y reproductivos?

Seguro te estarás preguntando, ¿Y esto qué tiene que ver con mis derechos sexuales y reproductivos? ¡Ah! Pues como juventudes tenemos 14 derechos, entre ellos está el derecho a decidir libremente con quién o quiénes relacionarnos de forma afectiva, erótica y social, pero es muy necesario reconocer que cualquier relación, ya sea sexual o afectiva, tiene que estar libre de violencia. Pues para ejercer plenamente cualquiera de nuestros derechos es muy importante conocer qué es la violencia, ya que nos permite saber si se están vulnerando nuestros derechos, y así construir y exigir relaciones no violentas.

Recuerda que parte de nuestros Derechos Sexuales y Reproductivos (DSyR), está el derecho a una vida libre de violencia, a la integridad física, psicológica y sexual. Cuidar de nuestras relaciones es cuidar de nosotrxs mismxs y ejercer plenamente nuestros DSyR.

En resumen, la violencia no solo se manifiesta en forma de golpes o cualquier maltrato físico, sino que también se expresa de manera psicológica y emocional a través de acciones sutiles de control, dominación o manipulación. Es importante conocer los tipos de violencia para poder prevenirla y/o erradicarla de nuestras relaciones, especialmente aquella que no es visible a simple vista, pues como vimos la violencia preponderante en las relaciones de pareja es la psicológica y esta tiene graves afectaciones en nuestro autoconcepto, autoimagen, y autoestima, así cómo con la forma en la que nos relacionamos con el mundo exterior.

Y ahora dime, ya sabiendo qué es la violencia en el noviazgo ¿no crees que Bella y Edward eran tóxiquísimos?, ¿qué te hubiera gustado saber antes de iniciar tu primera relación de noviazgo o sexo afectiva para evitar la violencia en ella?, ¿tú cómo construyes relaciones sanas?, ¿crees que Charlie si es una green flag?

¡Elijamos tener relaciones libres de violencia!

Fuentes:

Bibliografía sobre el amor romántico y estadísticas

https://www.gob.mx/imjuve/articulos/violencia-en-el-noviazgo-129663#:~:text=La%20violencia%20en%20una%20relaci%C3%B3n,control%20sobre%20la%20otra%20persona.

https://www.gob.mx/sipinna/articulos/violencia-en-el-noviazgo-no-es-amor-no-es-amistad?idiom=es

https://www.gob.mx/sipinna/articulos/violencia-en-el-noviazgo-no-es-amor-no-es-amistad?idiom=es#:~:text=De%20acuerdo%20a%20datos%20de,%25%20sexual%20y%2015%25%20f%C3%ADsica.

https://www.gob.mx/conapo/articulos/informacion-sociodemografica-de-las-relaciones-de-pareja-en-mexico

https://reunido.uniovi.es/index.php/PST/article/view/7188

https://www.raco.cat/index.php/anuariopsicologia/article/view/99354

https://www.redalyc.org/pdf/3498/349853220005.pdf

https://www.redalyc.org/pdf/567/56726350008.pdf

https://digibug.ugr.es/handle/10481/32269

https://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-94362019000200282

https://books.google.com.mx/books?id=INWIzkOBykgC&pg=PA67&dq=que+es+el+amor+romantico&hl=es-419&sa=X&ved=2ahUKEwiK54PDnOH6AhWtD0QIHRbtBZoQ6AF6BAgMEAI#v=onepage&q=que%20es%20el%20amor%20romantico&f=false

https://books.google.com.mx/books?id=3-tqRREYBVAC&pg=PA145&dq=que+es+el+amor+romantico&hl=es-419&sa=X&ved=2ahUKEwiK54PDnOH6AhWtD0QIHRbtBZoQ6AF6BAgLEAI#v=onepage&q=que%20es%20el%20amor%20romantico&f=false

  1. Instituto Mexicano de la Juventud, “”, [en línea], octubre 2017, dirección URL: https://www.gob.mx/imjuve/articulos/violencia-en-el-noviazgo-129663#:~:text=La%20violencia%20en%20una%20relaci%C3%B3n,control%20sobre%20la%20otra%20persona

  2. Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021, disponible en línea: https://www.inegi.org.mx/programas/endireh/2021/

  3. Ídem

  4. Ídem

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